Maestrat, ánima interior es un territorio con una singularidad y riqueza etnográfica privilegiada que se encuentra entre la costa mediterránea y el interior más montañoso del norte de Castellón, salpicado de olivos, almendros y algarrobos.
Esta tierra es un vivo reflejo de la cultura mediterránea en todas sus vertientes. Un lugar lleno de historia y con un patrimonio natural, agrícola y gastronómico excepcional.
Maestrat, ànima interior es un territorio histórico donde el pasado no se ha detenido, sino que sigue latiendo en cada piedra, en cada calle y en cada tradición. Esta tierra, ubicada en el interior de Castellón, guarda la huella de antiguas civilizaciones que dejaron un legado cultural único, visible hoy en rutas culturales, museos y centros de interpretación, y en múltiples experiencias que permiten al visitante conectar con siglos de historia.
Descubre el arte rupestre del mesolítico en el Barranco de la Valltorta, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y la herencia árabe en calles estrechas, casas con azoteas y antiguas norias. Revive la época medieval con la Reconquista de Jaume I y la Orden de Montesa visitando el Castillo de Cervera del Maestre y sus pueblos vinculados.
Este legado sigue vivo en el día a día de los pueblos de Maestrat, ànima interior, donde puedes sumergirte en su cultura mediante visitas guiadas, conocer el patrimonio en museos y centros de interpretación, o participar en experiencias que acercan la historia al presente. No te pierdas ni un solo rincón: cada espacio es una puerta abierta a la memoria viva del Maestrat.
En Maestrat, ànima interior, la naturaleza es la gran protagonista. Aquí, la belleza del Mediterráneo se muestra en su estado más puro, donde el entorno ha prevalecido sobre la huella del hombre, y cada rincón invita a una conexión profunda con el territorio.
Este paisaje, moldeado por el tiempo y el saber rural, alberga una rica biodiversidad que se despliega en campos de olivos milenarios, bosques, barrancos y montañas. El territorio ofrece una amplia red de rutas para todos los niveles: senderos locales, rutas homologadas, caminos BTT, rutas cicloturistas, zonas de escalada y espacios naturales protegidos.
Vivir el Maestrat es sumergirse en experiencias auténticas que conectan cuerpo y alma con el paisaje: paseos entre olivos centenarios, observación de aves, rutas interpretativas o simplemente perderse en la tranquilidad del entorno. Cada pueblo ofrece su propio acceso a la naturaleza, creando un mosaico de posibilidades para quien busca respirar hondo y reconectar con lo esencial.
La gastronomía es parte esencial de la identidad de Maestrat, ànima interior. En nuestros pueblos, los sabores tradicionales siguen vivos gracias a recetas heredadas y a productos locales de calidad: aceite de oliva, vinos, frutos secos, quesos, carnes, guisos y dulces artesanales.
Platos como la olleta del Maestrat, el tombet, el conejo con caracoles o el ternasco a la brasa reflejan el vínculo con la tierra y la huerta. Y para el final, postres como cuajadas, mermeladas, pastelitos y una buena cremaeta.
Disfruta de estos sabores en bares y restaurantes con alma rural o participa en auténticas experiencias gastronómicas para conocer el territorio a través de su cocina.